Para un deportista es fundamental mejorar, poco a poco, distintas capacidades de su cuerpo; como la velocidad, fuerza o la flexibilidad. Pero si hay algo que priorizar en este sentido, es la mejora del movimiento. Algo que se puede conseguir gracias al test FMS.

Antes de hacer hincapié en el resto de capacidades, es vital analizar qué ocurre respecto al movimiento. Para ello, lo primero y más básico de todo es saber de dónde partimos. Es decir, en qué estado se encuentra tu capacidad de movimiento hoy en día.

Lo ideal es completar el FMS test o prueba FMS. Con él descubriremos cuál es la calidad de movimiento de la que disfrutamos. A continuación, explicamos qué es y en qué consiste.